martes, 31 de julio de 2012

Cambio de papeles.

He soñado contigo. Sólo estábamos tú y yo, no había nadie más; pero algo había que hacía que diferenciase con claridad la vigilia del sueño, por lo menos esa noche...

Esta vez, eras tú quien me elogiaba en cualquier momento para hacer que me sintiese bien, sin pedir nada a cambio, simplemente porque te apetecía; eras tú quien me proponía planes para vernos y estar juntos; eras tú quien estaba muy pendiente de mí, preocupándote en todo momento en si estaba bien o no; eras tú quien, a pesar de mis malas contestaciones y mi mal humor, luchaba por sacarme una sonrisa hasta conseguirlo; eras tú quien ponía interés en que la relación que teníamos siguiese adelante...

Esta vez era yo el pasota, al que le daba igual todo; era yo quien dejaba un tema sin hablar pensando que ya se arreglaría sólo; era yo quien parecía que no tenía sentimientos; era yo el que siempre llevaba la razón, y nunca daba su brazo a torcer aún sabiendo que no llevaba razón alguna; era yo el que nunca pedía perdón, porque nunca creí que tuviese yo la culpa...

¡Vaya! Una pena que sólo fuese un sueño...

No hay comentarios:

Publicar un comentario